(adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});

22/9/13

Imagina que llegas al cielo




Imagina que llegas al cielo y el Señor te muestra una película: Lo que hubiera sido tu vida si...

...te animabas a asumir ese reto.
...te habrías animado a esa aventura de fe.
...no te hubiese importado el qué dirán.
...hubieses seguido esa carrera.
...habrías enviado aquella renuncia.
...habrías esperado un poco mas para casarte.
...l@ habrías buscado para decirle que l@ amabas con toda tu alma.
...te habrías animado a decirle lo que sentías.

Uf! Y en un instante ves lo que pudo haber sido tu vida, como todo pudo haber sido diferente...si tan habrías tomado aquella decisión que no te animaste.

Cuando era muy joven, no hice algo que debí haber hecho. No corrí un riesgo por cobardía. Y me dije: "No me vuelve a pasar nunca mas". A partir de entonces, prefiero equivocarme por hacer, prefiero hundirme por intentar caminar sobre las aguas, antes que calcular los riesgos mirando desde la barca.
Por lo general la vida no te da una segunda chance, tienes una sola oportunidad para patear, como si se tratara del último penal en los cuartos de final.
Cuando llegues a los años mas altos no te vas a arrepentir tanto por lo que hiciste...sino por todo aquello que no hiciste.

Cuando Dios hace de ti un líder, por tu salud emocional y mental debes saber que la mitad de la gente va a amarte y la otra mitad va a odiarte, y que ambos sentimientos van a ser muy profundos y marcados. El mismo Señor Jesús provocaba esa clase de sentimientos, aquellos que lo amaban incondicionalmente y los que querían llevarlo a la cruz. Cuando Dios te levanta, no hay grises. Bendices a algunos...y molestas a otros. Lo grave para alguien ungido sería causar indiferencia...o lo que es peor, caerle bien a todo el mundo.Lo asombroso del ministerio de Jesús, es que aquellos que lo odiaban, no podían ignorarlo. No podían dar media vuelta y olvidarse del asunto...ellos lo seguían todo el tiempo, escuchaban cada palabra para debatirla, lo esperaban agazapados, y en el fondo, admiraban en secreto que las multitudes lo siguieran, y como ellos no podían tener esa gracia...lo odiaban y por sobre todas las cosas, no podían dejar de estar pendientes de El.Los fariseos nunca han cambiado, son de manual. Por eso, tienes que enfocarte en los que si 
bendices.  

 Termina mi vida, llego al cielo y hay dos sillones, uno para mi y uno para Dios. 
Y un video que corre. El video se llama:
“Lo que pudo haber sido mi vida, si…”

Si…le confiaba mis finanzas a Dios.
Si…me animaba a hablarle a esa mujer.
Si…me atrevía a creer en mi llamado.
Si...aceptaba aquel reto.

Algunos van a llorar al ver lo que pudo haber sido su vida si le hubiesen creído a Dios. Otro dirán: "Es que no estaba seguro!" "Esperaba una confirmación tuya, Señor!"...pero será demasiado tarde.
Por eso, yo quiero minimizar la separación entre lo que será mi vida y lo que pudo haber sido. Quiero que mi vida se parezca lo mas posible a lo que Dios quiso que fuera.

Recuerda: Un día mirarás atrás, a una vida de conversaciones profundas, íntimas, sobrecogedoras y sinceras que nunca tuviste. Grandes y sólidas oraciones que nunca hiciste. Riesgos estimulantes que nunca corriste. Regalos sacrificiales que nunca ofreciste. Vidas que jamás tocaste. Y estás sentado en un sillón reclinable con un alma marchitada, y sueños olvidados. Y te das cuenta que había un mundo de necesidad desesperada. Y un gran Dios que te llamaba a ser parte de algo mayor que tu mismo. Ves la persona que pudiste haber sido, pero que no eres. Nunca seguiste tu llamado. Nunca saliste de tu cómoda barca.

Uf. Duele solo pensarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

“AMA LA VIDA QUE TIENES Y TENDRÁS LA VIDA QUE AMAS.”