Es arriesgado jugar con fuego, sin contemplar la posibilidad
de quemarse. Porque la infidelidad destruye la relación de amor con su pareja,
destruye la familia, destruye a los hijos, y además, deja a todos con graves
traumas emocionales, que pueden afectar para toda la vida.
Cada uno de nosotros tiene que lidiar cada día con infinidad
de problemas.
No todos se enfrentan a los mismos desafíos.
Cada uno con los suyos.
Pero si nos pusiéramos en su piel, en vez de criticarlos y
juzgarlos.
Seguramente aliviaríamos sus cargas.
Y podrían luchar con más ahínco para superarlos.
Todos, todos...en algún momento de la vida necesitamos ese
hombro donde llorar.
O ese abrazo cariñoso dado con amor.
O que alguien te seque las lágrimas y te mire a los ojos
diciendo...
Pasará...ya verás cómo pasará...
Reconforta saber, que hay personas que te quieren y velan
por ti.
... Deberías seguir sufriendo porque a tu pareja le guste el
engaño, la mentira, o la infidelidad? Crees que tú eres culpable que sea así?
Ella o él te quiere hacer creer que es por tu culpa? Vamos... ANTES DE
CONOCERTE, ESA PERSONA YA ERA ASÍ, SÓLO QUE TÚ NO LO SABÍAS. Formaste una
familia, creyendo en la fidelidad y el amor por siempre, pero parece que tu
pareja no piensa lo mismo. Qué responsabilidad podrías tener de lo que la otra
persona necesita para ser feliz? Piensa, reflexiona, y deja de sufrir, por algo
de lo cual no eres culpable, sino víctima.
No os reprimáis de hacerlo, no sabéis lo que eso significa
para alguien que sufre
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“AMA LA VIDA QUE TIENES Y TENDRÁS LA VIDA QUE AMAS.”